Octubre 5 y 6 de 2017
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACIÓN
EN CONTADURÍA Y ADMINISTRACIÓN
para la educación”. En ese mismo sentido agregan, citando a Coleman (1985, p.
219), “que la escuela constituye un marco social abierto y flexible en el que se
fomenta la interacción de apoyo y se favorece la consolidación de la confianza en
sí mismo de los estudiantes, por supuesto, con la orientación del docente, principal
generador de la interrelación de los aprendices con su comunidad, y con todos los
actores comunales”.
“Los estudiantes universitarios en nuestra sociedad se pueden considerar personas
privilegiadas, gracias al esfuerzo de sus familias y de toda la sociedad, reciben una
formación obligatoria, que continua con el bachillerato y culmina con la enseñanza
universitaria, que les lleva a ser profesionales preparados en su desempeño
profesional. Han recibido mucho de sus familias y de la sociedad” señala Martínez
(2011, p. 1). A estos estudiantes se les debe promover valores como son la libertad,
la equidad y la solidaridad; en consecuencia, deberán presidir su actuación la
honradez, la veracidad, el rigor, la justicia, la eficiencia, el respeto y la
responsabilidad, agrega el autor citado.
En su ponencia Participación social del estudiante universitario: Estatuto del
estudiante universitario, Martínez resalta (2011, p. 3) “la universidad hoy presenta
un papel muy importante en la sociedad. La formación ética y ciudadana de los
universitarios es un factor de calidad de la educación superior en el mundo actual,
que presenta tres dimensiones, la formación deontológica relativa al ejercicio de las
diferentes profesiones; la formación ciudadana y cívica de sus estudiantes y la
formación humana, personal y social, que contribuya a la optimización ética y moral
de las futuras y futuros titulados en tanto que personas”.
Ahora se precisa qué es un programa social, Pérez y Merino (2013) comparten lo
siguiente.